REFLEJOS - Y dónde está CACIQUE?????

Buenas noches estimados seguidores, para aquellos que me sigan en mis redes sociales no será sorpresa saber acerca de los últimos acontecimientos que me han mantenido bastante alejado de la producción de SOMBRAS. Y para aquellos que no están enterados paso a comentarles. En los últimos pocos meses ha sido muy poca mi actividad en las redes, debido a una suma de acontecimientos desfavorables. Sabiendo de mi trabajo principal como docente no es necesario describir que esta tan noble actividad se ha vuelto extremadamente exigente con la llegada de la pandemia del corona virus y la subsiguiente cuarentena, o como lo quieran llamar. Nos hemos visto obligados a aprender e implementar nuevas metodologías de enseñanza y nos hemos convertido, muchos de nosotros, en una presencia virtual a todas horas y de manera permanente, si bien cada docente tiene la libertad de administrar sus tiempos y sus horarios a su mejor comodidad, hay una realidad de la que yo no puedo escapar, cuando un alumno tiene una duda, cuando alumno está intentando aprender, hay que responder de inmediato, si se posterga la respuesta ya no llega a buen puerto. Pero eso es ya hilar demsiado fino en datelles innecesarios, la cuestión importante es valorar que nos estamos pelando el lomo y la cabeza por manetner un sistema educativo medianamente eficiente y viable en estas circunstancias, el futuro dirá si lo hemos conseguido o no. Se imaginarán que en un ambiente en permanente exigencia y demanda, fue sumamente difícil administrar los tiempos y poder dedicarse al sano arte que tan bien hace. Como agregado malicioso sumémosle que mis equipos tecnológicos, todos ellos, llegaron al punto de no retorno debido al sobreuso y el desgaste, la computadora que con tanto esfuerzo logré aprender a manejar por más de una década quedó rápidamente obsoleta. Lo positivo es que pude comprar una nueva, lo negativo es que no la sé usar, ni los programas de edición actuales, lo que implicará muchas más demoras hasta que más o menos le vaya agarrando la mano a todo esto. Pero siendo honestos no podemos echarle la culpa a las circunstancias directamente, cuando se juntan un par de pálidas uno se desanima, si se acuerdan de cuántas veces mencioné la visceralidad del arte entenderán que uno se bajonea y los ánimos de crear se van por la ventana. Saber que se pausó la producción de SOMBRAS cuando venía acomodándose bastante bien entre el público se vuelve un padecimiento cíclico, pero si algo he aprendido en la vida es que todo pasa, y que hay que saber valorar las cosas buenas aún en las peores circunstancias, así que valoro que tengo aún la posibilidad de comenzar de nuevo. Y así va a ser, más pronto que luego. Las cosas pueden llevarme más tiempo del habitual ya que mi prioridad es ponerme al día con responsabilidades laborales que se me acumularon en cuestión de días, y después ya habiendo solucionado la mayoría de ellas, abocarme nuevamente a la producción del número 8 de SOMBRAS. Pronto nos reencontramos. Un abrazo para todos.